- Falta de conocimiento de la industria del champú.
- Abundante competencia en el marcado.
- Ilegalización de una de nuestras materias primas (coca).
- La marca no es reconocida.
- No contamos con el sello de calidad ni con el registro INVIMA.
- Posicionamiento y gran reconocimiento de otras líneas de productos de champú entre los consumidores.